Tratamiento diseñado para revitalizar la piel madura, reducir la apariencia de líneas finas, arrugas y otros signos de la edad. Puede incluir diversas técnicas como masajes faciales, aplicación de sueros con ingredientes activos (retinol, antioxidantes), mascarillas específicas y aparatología.
Recomendaciones: La frecuencia puede variar según el tipo de facial y las necesidades de la piel. Se pueden recomendar sesiones mensuales o trimestrales para mantenimiento.